BNHA: Yo soy Reiji Toga

"¡¿Quién es el chico!?""¡¿Es un nuevo héroe o vigilante?!"¡¿Está registrado en alguna academia de héroe!?"

Los gritos se multiplicaban.

Shinso mantenía el contacto visual con Reiji, sin soltar el hilo mental que lo sujetaba desde adentro. La conexión lo agotaba, pero sabía que si la rompía, aunque fuera por un segundo… algo iba a explotar.

Reiji respiraba por la boca. Las venas del cuello estaban marcadas. El impulso seguía ahí. Exigiendo. Gruñendo como un perro encadenado.

"¡Tú!" Una heroína desconocida se acercó, señalando "Necesitamos saber tu nombre. ¿Estás con alguna agencia?"

Reiji no respondió. No podía. Solo giró ligeramente la cabeza, con los ojos inyectados en sangre. La línea estaba peligrosamente cerca.

Y entonces… algo cortó el aire.

Una ráfaga de viento y plumas.

"¡Oigan, oigan! Qué forma tan poco diplomática de recibir a un salvador, ¿no creen?"

Hawks aterrizó con elegancia entre ellos.

Los reporteros estallaron.

"¡¿Hawks?! ¡¿Qué hace aquí?!""¡¿Conoce al chico?!""¡¿Él lo entrenó!?"

Shinso dio un paso atrás, instintivamente. Reiji apenas movió los ojos. Pero algo en él se relajó.

Hawks había llegado.

"Déjenme manejar esto, por favor" Dijo el héroe al grupo de profesionales "Lo conozco. Y sí, actuó por su cuenta, pero gracias a él ese chico" Señaló a Bakugo "Sigue con vida"

"¿Pero está autorizado?" Insistió un héroe veterano.

"¿Tú estabas autorizado cuando el niño se estaba muriendo?" Replicó Hawks con una sonrisa afilada "Porque si seguimos con eso, van a salir mañana con titulares poco favorables"

Eso bastó para que se hiciera un silencio incómodo.

Hawks se volvió hacia Shinso. Lo midió con la mirada. Luego, con un tono más bajo, dijo:

"Gracias por mantenerlo en pie. Ya me encargo yo"

Shinso asintió, agotado. No sabia lo que estaba pasando realmente, pero sabia que era algo serio.

"Está al límite. No sé qué tiene, pero… es serio"

"Lo sé" Respondió Hawks, con los ojos afilados. "Por eso estoy aquí"

Shinso soltó la conexión.

Reiji se tambaleó.

Hawks lo sujetó del hombro, firme.

"Estás conmigo. Mira al frente. Respira conmigo"

"No puedo…" Susurró Reiji "Está gritando. En mi pecho. En mis dientes"

"Entonces grita más fuerte" Tenia una expresión seria, sabia que si Reiji se llegaba a dejar llevar por el impulso, incluso para él seria difícil pararlo. La sangre actuaria de forma más instintiva, violenta y poderosa. "Pero por dentro. Solo unos minutos más"

Reiji apretó la mandíbula. 

"Bien... Aunque no se cuando durare" Murmuró.

"Ya lo haces. Ahora sonríe un poco. O al menos no muerdas a nadie"

Reiji lo logró. Apenas. Pero lo logró.

Y entonces Hawks se giró hacia los medios.

"Agradezco la preocupación, pero no hay comentarios por ahora. Ahora mismo las autoridades tienen que hacer su trabajo y todavia queda cerrar la escena, les pido que se retiren"

Flashazos. Gritos. Murmullos.

Pero la escena se estabilizó.

Y Reiji… seguía de pie.

Gracias a Hawks. Gracias a Shinso.

Y gracias a sí mismo.

Pero definitivamente, no gracias a Izuku Midoriya.

***

La zona estaba acordonada.

La turba de civiles se había esfumado, después de todo, tenían vidas que atender.. Algunos héroes asistían en los escombros. Otros contenían a los medios detrás de una línea marcada por barreras provisionales. La calle olía a humo, cemento y sangre.

Reiji estaba sentado en el borde de una camilla portátil, las manos entrelazadas, los ojos fijos en el suelo. El temblor ya había cesado, gracias al "jugo" que Hawks le pasó disimuladamente minutos antes.

A pocos pasos, Katsuki Bakugo recibía atención médica. Tenía una manta sobre los hombros y una venda en el costado. No decía nada. Solo observaba.

Reiji sintió las pisadas antes de oírlas hablar.

"Nombre" Dijo una voz firme.

Levantó la cabeza.

Tsukauchi, jefe de policía, lo miraba con la calma metódica de quien está acostumbrado a hablar con gente peligrosa… o a punto de serlo.

Reiji no se movió.

"Reiji Toga"

"No estás registrado" Continuó Tsukauchi, con un tono que no era agresivo, pero sí claro "No tienes licencia. No perteneces a ninguna agencia. Y usaste un Quirk ofensivo en plena vía pública. Contra un villano. Rodeado de civiles"

Reiji lo miró directo.

"Lo sé"

Tsukauchi dio un paso más.

"¿Tenías autorización"

"No"

"¿Entonces por qué lo hiciste?"

Silencio.

Katsuki alzó levemente la vista.

Reiji inhaló.

"Porque si no lo hacía, ese chico se moría"

Tsukauchi no parpadeó.

"¿Y eso te da derecho a violar la ley?"

"No" Respondió Reiji, firme. Sabia perfectamente que es lo que queria escuchar el policia frente a él. "Pero no voy a pedir permiso para evitar una muerte"

El jefe de policía guardó silencio unos segundos. Luego bajó un poco el tono de voz.

"Hoy no te arresto. Porque salvaste una vida. Porque alguien" Miró de reojo a donde estaba Hawks, conversando con otro héroe "ya intervino por ti. Pero que no se te ocurra repetir esto sin cobertura. La próxima vez que actúes fuera del sistema, te vas con las manos esposadas. ¿Me explico?"

Reiji asintió con la cabeza, sin orgullo. Sin soberbia.

"Sí, señor"

"Bien"

Tsukauchi se giró sin más.

Katsuki lo observó irse.

Luego desvió la vista hacia Reiji. Los ojos de ambos se encontraron, apenas.

"Yo podía solo..." Dijo después de un momento, con una expresión molesta. Reiji no dijo nada, sabia que no le diría abiertamente gracias o algo así, y personalmente, ya le daba igual.

***

La puerta se cerró con un leve chirrido detrás de él.

Reiji dio apenas dos pasos dentro de la casa antes de que una voz lo golpeara de frente:

"¡¿¡En qué estabas pensando!?!"

Himiko estaba ahí, en el pasillo, con los ojos rojos, el cabello suelto y la mandíbula temblando.

"¡¿Te parece normal aparecer en las noticias cubierto de sangre?! ¡¿Con un villano encima?!"

Él no dijo nada. Bajó los ojos. Sabia que iba a caerle un reto a llegar a casa, se había preparado todo el camino para ello.

"¡Pudiste haber muerto!"

La madre apareció detrás, con el teléfono aún en la mano, como si hubiese pasado la última hora actualizando cada red social y noticiero con lágrimas en los ojos.

"¡Nos llamaste, sí! ¡Pero ver esas imágenes fue como una puñalada! ¡Verte ahí… solo… mientras todos gritaban! ¡Reiji, eres nuestro hijo!"

Él levantó lentamente la vista.

"Y lo sigo siendo. Pero si no lo hacía… ese chico estaría muerto"

Silencio.

No de paz. De impacto.

Himiko apretó los puños. La rabia aún brillaba en sus ojos, pero se tragó las palabras que venían después. Solo murmuró:

"Eres un idiota…"

Entonces, el padre apareció al fondo del pasillo.

No gritó. No se apresuró. Solo se acercó con calma. Alto. Serio. Con una expresión difícil de leer.

Se detuvo frente a Reiji.

Y le puso una mano firme en el hombro.

"Hiciste lo que había que hacer" Dijo, sin adornos "Y lo hiciste cuando nadie más se atrevio"

Esa fue su forma de decir "estoy orgulloso".

Reiji asintió, sin hablar.

La madre se limpió los ojos con frustración.

"No te estoy diciendo que estuvo mal" Dijo ella, con la voz más baja "Solo que… quiero que nos avises antes de hacer algo así otra vez. O al menos… siempre vuelve entero"

"Lo intentaré" Respondió Reiji, por fin.

Himiko suspiró. Dio media vuelta sin mirarlo y caminó hacia la cocina.

"Te preparé algo. No sé si lo vas a comer, pero no pienso dejarte dormir sin que te sientes cinco minutos como persona normal"

Reiji la miró irse. Luego miró a sus padres. Y por primera vez en todo el día, sintió algo parecido a… paz.

"Esta bien"

***

La ciudad dormía, pero Reiji no.

Desde el tejado de su casa, observaba las luces lejanas de Musutafu, con los brazos cruzados y el impulso de sangre finalmente controlado. El jugo que Hawks le dio tenía el sabor metálico apenas disimulado. Eficiente. Como todo lo que hacían.

Pero su mente no estaba ahí. Estaba en el puente. En el villano de lodo. En los recuerdos de su otro vida. En la ausencia.

Izuku Midoriya no apareció.

No corrió. No gritó. No saltó.

Y Reiji lo sabía. Sabía por qué.

'Fue por lo que le dije ese día.'

Una charla rápida. Un consejo racional. Bastó para desviar una decisión irracional.

Y con eso… la historia se fragmentó.

'Sin esa escena, All Might no lo mira. Sin ese acto, One For All no cambia de manos. Y sin portador, el tiempo se agota'

Porque All Might no era eterno. Y el Quirk tampoco.

Reiji cerró los ojos un momento. No por cansancio, sino para medir el peso exacto del error. Quería tener una vida plena, pero para ello primero tenia que surtir en medio de todos los problemas que traía la trama del mundo en el que se encontraba. Sin Izuku, toda la ecuación cambiaba.

'No importa si muere antes o después. Importa que cuando lo haga… alguien reciba ese maldito don'

No era cuestión de fe, ni destino. Era mecánica. Era estructura. Y él había movido la pieza más importante antes de tiempo.

Abrió los ojos. Volvió a mirar la ciudad.

'Tengo que asegurarme de que haya un testigo cuando llegue el momento. Uno con principios. Con valor. Con instinto. Y esta vez… no voy a intervenir.'

Midoriya aún podría serlo. Otro también. Eso ya no dependía de él.

Pero haría todo lo necesario para que, cuando el símbolo se apagara, la chispa no se perdiera.

No por error. Y no por él.

Por el bien del mundo mismo, sin una contraparte que bloquee todo el poder de AFO, entonces el mundo estaba destinado a la oscuridad. En el peor de los casos, el propia asumir esa batuta... Aunque sus posibilidades se redujeron drásticamente una vez que se unió a la comisión, All Might no era imprudente. No se lo daría a él, por su pasado y por su doble Quirk, pero en una situación de vida o muerte... ¿Quién sabe que podría pasar?