Sistema cultista en marvel

Victor miró a su triste empleada que acababa de entrar en la habitación despues de que le diera el permiso para hacerlo.

La figura delgada y temblorosa hacía que la bestia interna de cualquier hombre despertara, pensando que tendría el poder completo sobre la figura indefensa frente a el.

La postura de Melina, de principio a fin era suabe y temblorosa, la forma de caminar, postura, incluso la mirada parecía tímida y suabe, como lo que cualquier hombre esperaría de una chica débil e indefensa dispuesta a hacer todo por su lamentable hermanita enferma.

Victor ya tenía enterado todo lo que era esta mujer, pero eso no le negaba querer seguír el juego.

Eso pensó.

Esto era un buen juego de rol, Melina actuaba como la suabe mujer que está dispuesta a sacrificar su pureza acambio del bienestar de su familia, mientras que él era el jefe capitalista malvado que quiere acostarse con su empleada.

El estaba dispuesto a actuar, y así comenzó el juego.

Melina entró con pasos suabes a la habitación, el sonido de los tacones sonaban cuando chocaban contra el piso mientras la chica se acomodaba ligeramente el abrigo con una señal de obvios nervios.

Victor estaba sentado en su silla de jefe con respaldo alto, su ropa, la cual tenía el típico atuendo formal de oficina en esta época, se mantenía firme y ajustado sobre su cuerpo.

No se mencionaba amenudo, pero el se veía realmente bien en este tipo de ropa.

Los hombros anchos, y figura fuerte, hacía que las camisas se estiraran adecuadamente sobre su cuerpo musculoso; Tal vez era un poco mas delgado que el famoso capitan américa, cuyos pectorales sobresalían y se le llamaba el culo de américa, pero aunque no era tan inchado, su cuerpo era el famoso estilo en forma de perchero, así que cuando Melina entró y lo encontŕo sentado, bebiendo de una copa de vino, ella almenos suspiró en su corazón y pensó que no perdía mucho en este asunto.

Victor miró a Melina, quien se paró a unos metros frente a el.

Sintió una pared invisible que ella había creado con la distancia, demostrando la renuencia que ella tenía a este trato sucio y degradante.

[Melina]

Habló Victor por primera vez, haciendo que los hombros de Melina se estremecieran por su voz contundente, temerosa a lo que él podía hacerle.

Victor puso los ojos en blanco mentalmente, esta mujer, si que sabía como tratar con los hombres. Pensó mientras actuaba como un bastardo satisfecho ante la reacción de su presa.

[Entiendes bien para qué estás aquí, ¿Verdad?]

Preguntó con un tono de voz contundente.

Melina asintió con la cabeza mientras mantenía su mirada ligeramente en el piso, sus brazos delgados estaban apretados contra su cuerpo, así como sus dedos, pellizcaban con fuerza los dobladillos de su saco, pareciendo indefensa.

[Tranquila, puedes hablar]

Continuó victor con la charla.

Melina lamió sus labios rojizos, parecía que la boca se le había secado debido al nerviosismo.

[Um, si, yo se.. señor]

Victor asintió satisfecho.

[Bien, ben aquí]

Tocó una silla a su lado con la mano, mientras hablaba con un tono tranquilisador.

Melina se asercó obedientemente, y victor comenzó a servír vino en una copa para ella.

El vino era rojo brillante y manchó las paredes de la copa mientras se servía.

Ella se paró junto a él, aunque cuando estuvo alfrente de la silla, se detuvo, como si aún dudara, su postura congelada parecía decir que este era el paso final para entrar al pozo de fuego, y ella se debatía en pensamientos de si darse la vuelta y escapar, o sentarse y darse por vencida.

[¿Que haces ahí parada?, siéntate, vamos a beber un poco]

Dijo victor mientras ofrecía la copa de vino, aunque su tono de voz era mas para dar una órden que otra cosa.

Esto fue el golpe final, donde Melina se sentó en la silla mas por un acto de pánico, como si temiera las represalias por no sentarse.

Victor le entregó la copa a Melina al mismo tiempo que se acababa el vino de la suya y se volvía a serbír una vez mas.

Su acto parecía derrochador, como un gandalla que no apreciaba la cata del vino, la forma de servirse era llenar casi toda su copa hasta el final, y no hasta la mitad, como era la costumbre hacerlo para la degustación adecuada del sabor.

En sierta medida, demostraba que Victor seguía siendo un simple soldado cuya riquesa le vino de forma repentina, incapaz de entender el arte adecuado de como probar el vino adecuadamente.

Melina sostuvo su copa llena hasta el tope con una expreción aún lamentable, temerosa en la forma de sostenerlo, y esque la copa estaba tan llena que ella sentía que se derramaría si moviera un solo grado la copa de panza ancha.

[Vamos! prueba un poco, dicen que esto era realmente bueno]

Victor siguió con su acto de patán, tomando otro sorbo, y Melina, siendo instada por el mismo, no tuvo otra opción que asercar la copa hacia sus labios suabes y beber de ella.

Su forma de beber fue mas delicada, sus labios apenas tocaron el vino, como las libélulas que apenas acarician el agua de un lago, sin crear hondas con su paso suabe.

Despues de probar el vino, el pensamiento de Melina fue que era un desperdicio.

Era obvio que como una espía adecuada, la capacidad para probar su vino era muy buena, así que al probar este, ella descubrió que si bien no era algo único e inigualable, sin duda era muy caro.

Ella miró la botella, pero parecía un enbase común, sin etiquetas, pero por su entendimiento, del cual ella no dudaba que era excelente, el vino se comparaba a otros que costaban almenos varios miles de dolares por botella.

Luego ver como victor sorbía el vino como si fuera agua común, hizo que ella se lamentara un poco por la forma de derrocharlo.

Ella sorbió otro poco, esta vez mucho mas, daba el acto de alguien ya rendído, con el pensamiento de que era mejor bebér para envalentonarse con el alcohol.

Ante el pensamiento de Melina, incluso si Victor lo escuchara, no le importaría, el vino era realmente caro, encontró solo un par de botellas de esto en una caja fuerte mientras limpiaba la ciudad en aquél entonces, sin embargo, dejar caer una gota en la copa Hufflepuff hizo que este vino fuera infinito, por lo que no temía desperdiciarlo.

[Entonces, ¿Como se encuentra tu hermana?, ¿Quien la cuida esta noche?]

Victor comenzó una charla.

Melina sorbió hasta la mitad de la copa de una sola vez, y aún sin mantener una mirada en él, ella respondió.

[Ella está muy bien, gracias a usted jefe, el dinero que hizo que Sofia me pasara, fue muy útil y ella se está recuperando muy bien, Gracias por preguntar]

Las mejillas de melina se relajaron cuando el tema de su hermana llegó, Victor casi creía que realmente estaba conmovida.

Tenía que admitirlo, era muy buena actuando.

Justo ahora se arrepentía un poco por no usar el aprendizaje de actuación, que había ganado en la loteria del sistema no hace mucho.

Solo pensaba que si hubiera obtenido esa habilidad, bien podría intercambiar un trama super tóxico y venenoso con melina, de amor y desamor, pero como no era así y solo podía usar sus habilidades pobres de actuación, entonces el único papel que tenía confianza era de un bastardo patán.

[Bien, eso es bueno.

Dime, ¿Como-]

La charla se alargó poco a poco, Victor llevó la iniciativa de la charla para relajar un poco a Mellina, mientras que ella bebía vino para envalentonarse y al mismo tiempo ella actuaba de una chica tímida a una chica un poco mas audaz por el alcohol.

Cuatro copas mas tarde.

Las mejillas de Melina estaban sonrosadas, su mirada era un poco vasilante, y la temperatura de su cuerpo aumentó ligeramente, haciendo que el calor ardiente que llegaba desde sus entrañas, subiera y calentara su cuerpo, el cual languidesía en su asiento suabemente.

Victor no era muy diferente, aunque no estaba borracho y en su expreción no se veía la embriaguez, la realidad era que llevaba el triple de copas que Melina, con algunas botellas apiladas en la mesa.

En algún punto, los abrigos se quitaron, Melina quedó con una blusa blanca de dama sobre ella, con un par de botones abiertos, resaltando un escote profundo con piel blanca apretada por un sostén negro por debajo; mientras tanto, victor era similar, aunque con los botones abiertos y mangas recorridas hasta los codos, se veía el pecho musculoso y brazos fuertes, los cuales tenían marcas de sicatrísez antiguas.

Ante la vista, Melina miró el brazo de victor con genuina curiosidad.

En algunas fotografías que sofía había tomado, se podían ver las raras sicatrícez que tenía victor en su cuerpo, eran extrañas y no parecían ser el rastro de algo que un soldado debería tener por haber participado en una guerra moderna.

Algunas parecían laceraciones, otras eran como de puñaladas profundas, e incluso una sicatriz en su brazo, parecía como si le hubieran arrancado la mano y luego se la hubieran pegado con grapas y cinta adesiba.

Lo que un subordinado médico dijo, fue que parecían mas como las heridas que un guerrero medieval tendría, un guerrero que luchara en guerras con espadas y cazara bestias.

Decía que un par de estas heridas, eran tan similares a la mordida de una criatura como un tigre que no pensaba que algún arma moderna lograra hacer tal cosa.

Aprobechando el momento, Melina preguntó.

Mirando la herida mas aterradora del brazo, ella puso una expreción de sorpresa cuando movió su mano delicada, tocando el brazo con un dedo, fue delicada, como si Victor pudiera sentír aún dolor de la lesión.

Con una mano cubriendo sus labios entrabiertos, preguntó.

[Oh por dios, ¿Que te sucedió aquí?]

Victor, obviamente no le diría que la herida la hizo una enboscada de varios cerberos y conejos unicornio en una mazmorra de estílo de fantasía, por lo que entrecerrando los ojos, fingió recordar y dijo.

[Eso sucedió durante la guerra.

Mi batallón fue enboscado en un bosque en las afueras de un pueblo pequeño en la unión soviética, una granada enemiga fue lanzada hacia mi unidad]

Entrecerrando los ojos, Victor pareció recordar una escena aterradora, y esque en realidad hubo una escena aśi en su memoria, cuando llegó aquí, su predesezor abía perdído un brazo, por lo que recordar algo así no era nada para él.

[Todo mi equipo resultó herido, y mi brazo resultó así, los médicos dijeron que el brazo estaba perdído, pero parece que tuve suerte]

Una sonrisa apareció en su rostro, y recordó que la última vez que puso una excusa similar, fue el año pasado con ese coronel Sergei que lo había investigado en Markov.

Melina puso los ojos en blanco mentalmente.

Era obvio que eso era mentira y victor no le quiso contar la realidad.

Ella siguió intentando actuar delicada y recatada, pero Victor sintió que ya era hora.

Tomando a Melina desde su cintura, la arrastró repentinamente hacia su regazo en un momento donde Melina no se lo esperaba.

[¡Ah!]

Ella soltó un suabe grito el cual fue ahogado en un momento despues, cuando victor bajó el rostro y tomó los labios suabes de la mujer.

Los labios de Melina eran cálidos, el calor de ambos cuerpos exudados debido al consumo del alcohol se combinó en un instante, haciendo que la temperatura de la habitación subiera. No se sabía si era por sus cuerpos calientes, pero una débil fragancia emanaba de Melina, similar al sudor, pero suabe y fragante, que por un momento victor sintió reconfortante y seductor.

Ambos se separaron, los ojos de melina estaban borrosos, sus labios brillantes, estaban entreabiertos exudantes de su aliento fragante y cálido que emanaban con un aroma dulce y delicado aromatizados con el olor del vino ingerido de antemano.

[Victor, yo-]

Melina aún parecía reticente, sus ojos parpadeaban y sus pestañas temblaban con nerviosismo, esto hizo que cualquier hombre se sintiera como una bestia apunto de comerse un animalito indefenzo, y justo esto era lo que victor tenía planeado.

Sin decir palabra, bajó la cabeza una vez mas y tomó los labios de Melina.

Las bocas se entrelazaron, los alientos se envolvieron.

Melina parecía intentar retirarse al inicio, pero al final, solo dejó que victor hiciera con ella lo que quisiera, ella casi no coperó, pero no se resistió y esto fue justo lo suficiente para parecer que aún no estaba tan convencida.

Las manos de victor se volvieron salvajes poco a poco, acariciando la cintura de melina y finalmente alcanzando uno de sus pechos encima de la ropa y apretando con suabidad el montículo con la mano.

Un gemido apareció entre los labios de melina, pero victor lo ignoró.

El calor en la habitación aumentó, la temperatura de ambos se contagió y pronto, suabe pero con un crecimiento obvio, Melina comenzó a responder muy suabemente.

El intercambio fue largo y apacionado, victor parecía embriagado con Melina, mientras que Melina parecía un poco borracha y con este impulso, comenzaba a responder de forma torpe e inexperta.

Pronto, los botones de la camisa de melina se desabrocharon hasta la mitad, y su sostén negro se hizo notar.

Victor lo miró, y por un momento se sintió inexplicable.

No era que no fuera seductor, de hecho, para lo que sabía, si que lo era, pero.. el sabía de marcas de ropa interior como Victoria´s Secrets, donde se demostraban algunas cosas bastante increibles.

Se juró que tendría que crear su propio desfile antes que nunca si no quería vivír en una vida donde hacía falta ese tipo de ropa interior.

Despues de anotar esto mentalmente, siguió adelante.

Los pechos apretados de Melina tenían un ligero perfume delicado, y Victor se atrevió a querer probarlos, así como la delicadeza de su cuello y clavícula.

Era obvio que melina comenzaba a exitarse cuando cerró los ojos y su aliento comenzó a volverse algo caótico, su corazón se aceleró y sus mejillas se sonrojaron ya no por el alcohol, sino por que ella estaba comenzando a coperar consigo mismo.

La camisa de melina se abrió por completo y su estómago delicado con un ombligo en forma de gota apareció frente a el, cuando Melina abrió los ojos y puso una mano para detenerlo suabemente.

[¿Que pasa?]

Victor tenía una expreción anciosa, como si no pudiera aguantarlo, mientras que melina, con su papel de chica apropiada, susurró de forma delicada.

[La cama]

Victor casi ponía los ojos en blanco una vez mas, pero aún con una expreción anciosa como un perro cachondo asintió y la levantó como una princesa mientras caminaba hacia la cama.

Melina se sorprendió un poco.

Ella pesaba unos 55 kilos, era algo alta y sabía que no cualquier persona podría cargarla tan simplemente, pero, en los brazos de Victor, parecía que no pesaba nada.

Entrecerrando los ojos, la posibilidad de que Victor fuera un tipo con gran fuerza aumentaba cada vez mas.

Ella fue puesta sobre la cama.

Victor, como un animal en celo se lanzó sobre Melina mientras que comenzaban a desvestirse.

[Yo- yo quisiera que fuera un poco lento..]

Dijo Melina entre jadeos, y Claro, victor asintió.

[Claro que si]

Melina iba tomando el contról de la situación poco a poco.

Bueno, no tomando el control, pero llevando las cosas a su ritmo, y esto ya demostraba las habilidades que tenía.

Claro, habilidades que se demostraban solo porque Victor sabía de esto, si el no quisiera, entonces podría atacarla de una sola vez, pero eso no sería interesante.

Almenos, Victor tenía que admitirlo, si no supiera de Melina, era seguro que para este momento, el seguiría tomando vino y no se habría apresurado tan abruptamente.

El planeaba charlar un poco y luego follar, pero de forma inconciente, las cosas se alargaron demaciado,esto hizo que se sintiera algo sorprendido por las habilidades que tenía melina.

Melina tambien, quería alargar las cosas, si emborrachaba a victor hasta la inconciencia, entonces todo se habría solucionado muy rapido, pero este tipo la atacó tan rápido que solo pudo seguirle el ritmo.

La camisa blanca fue despojada, y la falda larga hasta las rodillas se quitaron.

Las zapatillas negras se arrojaron a alguna parte de la habitación y pronto, melina estaba en ropa interior negra delicada, con medias negras que envolvían sus pies de forma apretada y firme.

Victor tenía que admitirlo, esas piernas eran un manjar para la vista.

Las medias negras llegaban justo hasta la mitad de las piernas.

Estas eran largas y regordetas, la liga apretaba la carne suabe y esto creaba una zona de reliebe perfecto, las pantorrillas eran igualmente delicadas, y los pies pequeños terminaban en dedos delicados que se curvaban de forma delicada cuando Victor los veía.

Victor pensó.

Estos eran los pies legendarios con los que se podían jugar durante 40 años?, esos pies, eran los artículos de apresiación que todo fetichista de pies desearía?

Melina no tenía un gran pecho, pero sus piernas eran largas.

Ahora entendía donde estaba su fortaleza.

Arrojando su camisa, Victor expuso su torso fuerte y musculoso.

Ante tal vista, melina tambien se sintió agusto.

No tenía que acostarse con un tipo gordo y desaliñado, aunque las sicatrizes no eran bonitas, se podía pensar que eran agradables de ver en lo que a ella respecta, significaba que esos músculos no eran falsos y adornos, sino que era un verdadero hombre fuerte que los sabía usar.

Al final, Melina tambien era umana, por lo que aunque su actuación tenía que ser de una flor delicada, ella no pudo evitar pensar que disfrutar esto no estaría mal.

Ambos se cruzaron una vez mas, y se besaron.

Parecía que el alcohol en Melina comenzaba a hacer efecto ya que sus piernas se enredaron alrededor de el torso de Victor y abrazó su cabeza.

Las sábanas de seda se arrugaron y el calor aumentó.

Era interesante para Victor.

siempre fue algo brusco, Edna,olga, melina, Madeline, Carla, sofia, no había una que no hubiera sido empujada con la iniciativa total de victor, con las posiciones y al ritmo que le gustaba a el, en una bañera, madre e hija, con fuerza y a su gusto, pero, nunca sucedió que el estuviera en un acto donde pareciese lelvar la iniciativa, pero las cosas fueran tan lentas.

Hasta ahora, Madeline nisiquiera había perdido las medias, y ella aunque era el papel débil, tenía la iniciativa total para controlar el progreso de Victor sobre ella.

¿Porqué se menciona esto?

Porque solamente despues de alrededor de casi una hora victor se dio cuenta de la extrañesa, y entendió que Melina tenía una vez mas la iniciativa total.

Victor se separó del beso con los ojos confundidos de melina.

Ella aún tenía sus piernas alrededor de su cintura y Victor la miró con una sonrisa y ojos entrecerrados.

Lo tenía que admitir, tener sexo con una mujer experta, era otra cosa.

[¿Victor?]

Preguntó Melina con ojos confundidos.

Victor sonrió pero no dijo nada mientras tomaba la cintura de melina y la tiraba hacia el.

El sostén de la mujer fue quitado en un instante, y los pechos blancos con formas redondas perfectas se expusieron al aire.

Los pezones de un color marrón claro eran delicados y pequeños, las puntas eran delicados y parecían capullos en flor que estaban ligeramente endurecidos.

Las manos de melina los cubrieron cuando se entrecruzó de brazos, ella no pudo evitar mirar hacia otro lado con verguenza mientras cerraba los ojos.

Sus pestañas revoloteaban y su ceño se frunció ligeramente.Parecería que sería hora de comenzzar a jugar con sus pechos, pero victor no fue hacia eso, sino que tomó sus bragas, y con un movimiento limpio, las tiró hacia atrás, y las sacó de su cuerpo.

Esta vez Melina estaba realmente sorprendida.

¿Este salvaje no sabía seguír los ritmos?

El tiene que comenzar con sus pechos, ella finje apretarlos con timidéz, luego los muestra, y el comienza a jugar con ellos, durando casi otra hora mas de tiempo.

¿Porqué ir hacia su punto mas importante de una vez?

Melina abrió los ojos de par en par con sorpresa, y al ver eso, Victor sonrió.

El arrojó su ropa a un lado sin contemplaciones, pronto, estaba desvestido, y estaba con el pene inchado y erecto sobre su punto vital.

Sus piernas estaban cerradas fuertemente, evitando que mirara o siquiera entrara, pero esto solo hacía que su pene fuera apretado entre las piernas delicadas con una textura cremosa y caliente.

[Ah, victor, espera]

Melina dijo cuando entró en pánico por un segundo, pero Victor finalmente comenzó a jugar con sus pechos.

Estos no era de una copa grande, de hecho, melina no era alguien de un cuerpo como de un reloj de arena, con cintura de abispa y culo de abispa.

Era mas algo elegante y delicado, por lo que cuando atrapó sus pechos con las manos, no le sorprendió que estos cabieran perfectamente en sus palmas como si estuvieran hechos a medida.

Melina no pudo evitar que el no hiciera esto, y solo pudo seguir su ritmo mientras aún apretaba sus piernas.

A el no le importó esto, mientras que movía su cintura hacia adelante y hacia atras.

Su verga erecta estaba apretada en el triangulo de su pubis, y dos piernas, por lo que mientras ella apretaba las piernas, su pene se restregaba con fuerza contra su vajina poco a poco.

Ella estaba entrenada para que en situaciónes así, no se exitara demaciado y mantuviera su mente fria, pero lamentablemente para ella, Victor ya estaba preparado cuando en un punto que ella no notó, la mano de victor se movió y lanzó un hechizo simple.

No hacía mucho este hechizo, solo evitaba que melina pudiera comenzar a pensar en mesas y multiplicaciones mientras tiene sexo para evitar orgasmos o mantener una mente fria.

Así, melina quería entrar en un estado mental adecuado para resistírse al instinto natural de su cuerpo, pero no podía hacerlo por mucho que lo quisiera.

Esto hizo que su coño se apretara ligeramente, y un líquido transparente comenzara a ser secretado por ella, demostrando que el movimiento constante de Victor comenzaba a tener un efecto.

Victor se entretuvo bien con el cuerpo de melina.

Cada parte de ella era mas que fragante, sus labios, su cuello, sus clavículas, hombros delicados, sus pechos, su estómago, sus largas piernas envueltas en medias...

De hecho, entretenerse con ella fue muy interesante.

Mientras se besaban, melina no pudo evitar fruncir el ceño en confución, simplemente, quería detener su cuerpo y-

[¡Ugk!]

Victor sintió que Melina lo mordía cuando su cuerpo se apretó y tembló ligeramente así como se apretaba contra el.

El no entendió que le había pasado cuando repentinamente sintió un aroma femenino característico y en su pene, sintió la humedad cálida de melina.

Ella se separó despues de unos segundos, mientras la confución aparecía por un segundo en sus ojos.

Victor se separó y miró hacia la zona donde las piernas que antes se cerraban, ahora estaban algo flásidas.

Victor no fue amable cuando tomó las rodillas y las abrió, demostrando una vajina delicada.

El bello púbico estaba depilado delicadamente en una forma de triangulo sobre su pubis, se veía limpio y adecuado, debajo de esto, su vajina, una zona suabe y con forma de montículo que estaba cerrado meticulosamente y ahora tenía algo de líquido emanando y que caía en un par de hilos transparentes hasta sus piernas y trasero.

Victor miró esto con ojos divertidos.

Si, al final de todo, Melina era una mujer sana que con suficiente estimulación, podía tener un orgasmo precoz.

Intercambiando miradas, Melina finalmente parećia algo avergonzada en verdad y el le sonrió.

[Bien, voy a entrar, no solo tu puedes divertirte]

Dijo victor, dejando a melina sin palabras.

Apuntando su pene erecto contra su entrada, melina recordó su papel cuando lo intentó detener para actuar como una chica tímida.

[Victor, espera,yo ¡Ah!]

Victor no fue agresivo, pero fue inesperado que cuando empujó su glande contra la entrada vajinal de Melina, fue como si su hermano regresara a casa, entrando en el lugar perfecto y a su medida.

De un solo empujón, el glande se abrió paso, y poco a poco, aunque había algo de obstrucción y se sentía apretado, fue muy cómodo entrar.

Pronto, con el sonido de las pélbis chocando, victor llegó a la zona mas profunda de Melina y ambos estaban realmente conectados.

Victor cerró los ojos sintiendo esta sensación.

Era apretado, pero no obstructivo, no era como si se sintiera que melina era una persona con gran experiencia, de hecho, sofia se sentía así, era muy buena, pero siempre parecía que entraba demaciado facilmente, sin embargo, Melina era perfecta.

¿Esto era la viuda negra?

Victor no se movió, simplemente sentía que ahí estaba perfecto.

Claro, eso fue hasta que las piernas se envolvieron alrededor de el, y de forma inconciente, se apretó mas.

Parecía que melina tambien se sintió bien cuando sus ojos se abrieron con sorpresa.

Ambos se miraron los unos a los otros.

Las miradas se entrecruzaron, y pronto, pareció que una granada de líbido con feromonas y lujuria fue lanzaod en la habitación cuando comenzaron a revolcarse en la cama.

Los labios se entrecruzaron cuando la cintura de Victor comenzó a moverse, entrando y saliendo de melina.

Su coño apretado parecía absorverlo y no quererlo dejar ir, sus nalgas redondas y suabes eran apretadas por sus manos y sus pezones duros apuntaban hacia arriba y eran manejados por el en una combinación perfecta y armoniosa.

Los fluidos se intercambiaron, y Las medias negras en las piernas se humedecieron con el sudor que empapaba poco a poco ambos cuerpos.

[¡Ah!]

Los gemidos de melina sonaron cada vez mas, y finalmente, ambos no pudieron parar cuando se sentían intoxicados con la presencia del otro.